Sogepsa comienza los derribos de las viviendas de Roces

En el caso de la casa derribada ayer, junto a la vivienda hay una panera que deberá ser trasladada, ya que estos elementos están protegidos por la Comisión de Patrimonio del Principado de Asturias, dependiente de la Consejería de Cultura. Otra de las fincas afectadas también incluía un hórreo que, en ese caso, se llevarán los propios dueños del terreno a su próxima vivienda.

Artículo puesto en línea el 9 de febrero de 2007

por Prenseru

08/02/07 El Comercio

Sogepsa comienza los derribos de las viviendas de Roces

Tras las demoliciones de casas y naves iniciará los movimientos de tierras Desde el arranque de los trabajos sólo se realizaron tareas de desbroce

O. ESTEBAN/GIJÓN

DEMOLICIÓN. La máquina, en pleno derribo de una de las viviendas afectadas por el plan de Roces. / P. CITOULA

En pocos días la zona habrá cambiado completamente. La Sociedad Mixta de Gestión y Promoción del Suelo de Asturias (Sogepsa) ha iniciado el derribo de las cinco viviendas que estaban afectadas por el plan especial de Roces. Ayer mismo fue demolida la única de las cinco casas que hacía tiempo que no estaba habitada, sita en una de las fincas más grandes que componen el millón de metros cuadrados donde se actuará. El martes se había demolido la primera. Los propietarios de todas ellas habían abandonado sus casas en los últimos meses, excepto en un caso, en el que la propietaria había obtenido una moratoria de Sogepsa y permaneció en la vivienda hasta hace tan sólo dos días.

En el caso de la casa derribada ayer, junto a la vivienda hay una panera que deberá ser trasladada, ya que estos elementos están protegidos por la Comisión de Patrimonio del Principado de Asturias, dependiente de la Consejería de Cultura. Otra de las fincas afectadas también incluía un hórreo que, en ese caso, se llevarán los propios dueños del terreno a su próxima vivienda.

Las demoliciones se están llevando a cabo sin ningún problema. Tan sólo algunos vecinos que paseaban por la zona se detenían ayer a observar los trabajos. La presidenta de la asociación vecinal, Elena Medina, hablaba ayer de «resignación», después de varios años de oposición al proyecto.

Los trabajos de derribo durarán aproximadamente todo el mes, ya que no sólo hay que demoler las cinco casas, sino también algunas naves, tendejones y otros pequeños elementos. Después, la empresa adjudicataria de estos trabajos comenzará los movimientos de tierras. Habrá que mover nada menos que 793.000 metros cúbicos. Además, el BOPA publicó ayer la aprobación de varias construcciones y cambios en líneas de alta tensión en la zona. Pero lo cierto es que los trabajos no han cesado desde que se pusiera la primera piedra de esta gran actuación urbanística, el pasado 18 de diciembre. A finales de ese mismo mes finalizaron las labores de topografía y luego comenzaron las de desbroce de los terrenos.

Los trabajos de urbanización tienen un plazo de 18 meses. Los vecinos lamentan que «después de una batalla, empieza otra, intentar que las obras molesten lo menos posible».