Jardines, ’oasis’ de biodiversidad

Actualmente más de la mitad de la población mundial vive en las ciudades, apartándose poco a poco del contacto directo con la naturaleza. Cada vez se nota más la existencia de seres humanos ’urbanitas’, muy diferenciados de las personas que viven en el medio rural.

En estos medios urbanizados, los parques y jardines representan pequeños ’oasis’ de naturaleza en la que encuentran acomodo muchas especies de animales y plantas silvestres. Su importancia para la biodiversidad es enorme, mucho mayor de lo que muchas personas piensan.

Hoy en día los parques públicos se diseñan con criterios ambientales, aparte de los habituales criterios estéticos y funcionales. De esta manera se puede conseguir hábitats parecidos al forestal en plena ciudad, permitiendo la vida completa de muchas especies animales.

Ideas para jardines privados

También los jardines privados, tan abundantes en algunas zonas de Avilés, tanto en el centro de la ciudad como en la periferia, pueden formar parte de esta red de soporte de biodiversidad y beneficiarse del disfrute de la naturaleza desde la ventana de casa.

A continuación proponemos algunas medidas sencillas que pueden ayudar a naturalizar nuestra ciudad. Además pueden suponer un entretenimiento muy práctico a gente mayor y unas experiencias inolvidables para los más pequeños:

– Procurar diversos ambientes, con zonas de árboles o arbustos perennes, plantas trepadoras, plantas con floración en distintas épocas.

– Seleccionar árboles y arbustos autóctonos, evitando al máximo las plantas exóticas, ya que acaban siendo un problema porque se extienden de forma incontrolada.

– Intentar tener plantas con frutos, que atraerán a muchas especies de fauna al jardín. Muchas veces las bayas suponen la diferencia para poder sobrevivir en invierno o para poder continuar viaje en caso de aves migratorias.

– Colocar comederos y cajas-nido para facilitar para que se instalen los pájaros. Son muy fáciles de construir y de mantener. Pídenos ayuda sino tienes muy claro como hacerlo.

– Un tocón o un trozo de tronco viejo puede ser el lugar idóneo para el desarrollo de algunas especies, como el espectacular ciervo volante.

– Otra actuación interesante es la construcción de una pequeña charca o un estanque. Será muy interesante ver como diferentes especies de plantas y de anfibios la colonizan, como ponen sus huevos y se desarrollan. También la visitarán las libélulas y muchos pájaros se acercarán a beber y a refrescarse.

Para aprovechar la materia orgánica es muy fácil tener un compostero, un pequeño espacio en el que amontonar los desechos orgánicos de la casa y del jardín. Así se facilitará la vida de gran variedad de organismos, a la vez que conseguiremos un estupendo abono para satisfacer las necesidades del jardín.

Con algunas de estas medidas u otras parecidas podrás ayudar y mucho a mejorar las condiciones de vida de muchos otros seres vivos y además disfrutar en directo de su día a día.