Los hórreos dobles son una asociación poco común de este tipo de construcciones.

La empresa Dolabay-Erma, que pertenece al grupo Proinasa, promotora de la urbanización y campo de golf de Los Balagares en Truyés los derribó en abril de 2006.

Reseña anterior a su destrucción, enviada a los medios como nota de prensa.

VALORACIÓN DE LOS ELEMENTOS MÁS SINGULARES DEL CONJUNTO ETNOGRÁFICO DE TRUYÉS (CORVERA DE ASTURIAS)

Por Jesús Antonio González Calle
Doctor en historia y miembro de La Foz del Pielgu.

Los hórreos dobles de Truyés son una asociación poco común de este tipo de construcciones.

Sobre un cuerpo de piedra, que forma parte indisoluble de la construcción, se elevan dos hórreos juntos, uno de los cuales presenta (o presentaba) una puerta con sencillas divisiones geométricas que remitirían a comienzos o mediados del siglo XVIII, siendo tal vez el otro algo anterior.

En general, cuando se unían dos hórreos, lo normal era que diesen lugar a una construcción nueva, generalmente una panera de grandes dimensiones. Sin embargo, en Truyés se optó por una solución mucho más peculiar y desde luego minoritaria. De esta manera, se mantuvo la independencia de cada hórreo, pero ambos pasaron a alinearse juntos compartiendo un mismo tillao o plataforma al que se accede por una misma subidoria; también son compartidos el corredor de balaustres torneados, el tornaaguas y la cubierta, que le confieren un aspecto exterior aparentemente de panera. Sin embargo, entre el tillao y la cubierta, las dos cámaras independientes se hallan separadas por un pasillo interior, con lo que efectivamente se afirma la autonomía y privacidad de ambos hórreos aún compartiendo todos esos elementos estructurales comunes (subidoria, tillao, tornaaguas, cubierta...).

El conjunto es así lo suficientemente singular y valioso como para que se proceda a su conservación y a la reposición fiel de las partes dañadas o expoliadas, habida cuenta de la existencia de abundantes fotografías para orientar esa labor de restauración.