– Alcaldes, ecologistas y montañeros se unen para pedir que el Aramo sea espacio protegido

– Más de la mitad de la superficie de las Cuencas será protegida con el futuro parque del Aramo

2/9/2006

La Nueva España

CUENCAS

Alcaldes, ecologistas y montañeros se unen para pedir que el Aramo sea espacio protegido

Paisaje de la sierra del Aramo.

Reclaman al Principado que desbloquee esta declaración, prevista en el plan regional de recursos naturales desde 1994 y todavía sin tramitar

Mieres / Langreo,

Beatriz G. FANJUL
Las Cuencas quieren aumentar su red de espacios protegidos. Así lo reclaman alcaldes, ecologistas y montañeros, que piden al Principado que declare la sierra del Aramo como espacio protegido. El plan de ordenación de los recursos naturales de Asturias (PORNA) la incluye como futura área protegida, pero su declaración no se ha hecho todavía efectiva pese a que está prevista desde 1994. Desde entonces, su tramitación está paralizada pese a que muchos consideran al Aramo como la «joya» del patrimonio natural de la comarca del Caudal. Su riqueza botánica y zoológica y su patrimonio cultural, con numerosos elementos etnográficos, justifican esta declaración, según sus defensores. En concreto, la parte susceptible de protección afectaría a los concejos de Quirós, Riosa y Morcín, al menos tal y como se establece en el actual PORNA.
Su reclamación vuelve a la primera línea de debate tras la reciente declaración de las Ubiñas-La Mesa como parque natural. Además, el Ministerio de Medio Ambiente acaba de anunciar que quiere aumentar los espacios naturales y estudia la declaración de otros cinco parques nacionales. Asturias es una de las regiones con más porcentaje de áreas protegidas, pero muchas son las voces que reclaman más declaraciones, entre ellas para las Cuencas.

Una de ellas es la del alcalde de Morcín, el socialista Jesús Álvarez Barbao, que desde hace años viene reclamando la declaración del Aramo como espacio protegido. Barbao incorporó esta petición como sugerencia cuando los socialistas estaban redactando el plan estratégico de la comarca del Caudal. Hoy, este documento ya incluye como objetivo proteger con alguna figura la sierra del Aramo. «Las ventajas serían muchas. Como ocurre en todos los casos, este tipo de protecciones puede chocar con los intereses de los ganaderos, pero creo que debería abordarse de forma inmediata», explicó.

El alcalde de Riosa, José Antonio Muñiz, es más exigente y asegura que el Aramo tiene valores suficientes como para ser declarado parque natural. «Es algo que todos damos por hecho, pero que lleva mucho tiempo de parón. Es el pulmón de la zona central de Asturias», matizó Muñiz.

El experto montañero Ángel Fernández Ortega, miembro de la Federación Asturiana de Montaña, también considera que el Aramo tiene características suficientes para ser parque natural. «La montaña y su entorno tienen unos grandes valores», explicó. «Está dispuesto en el PORNA, pero se adelantaron las Cuencas», añadió. Y es que inicialmente estaba previsto que el espacio protegido del Aramo obtuviera esta declaración antes que el paisaje protegido del Nalón y el Caudal. La misma opinión defiende desde hace meses el colectivo ecologista La Cirigüeña, en Morcín, que dirige Joaquín Arce. «Reúne todos los requisitos de un espacio protegido por sus valores y su ganadería tradicional», explicó.

El alcalde de Lena, Hugo Morán, hizo además otra propuesta. Asegura que su Ayuntamiento defiende la colaboración entre todas las áreas protegidas colindantes, tanto de la región como de fuera, y propone abrir líneas de cooperación entre las Ubiñas y otros espacios leoneses.

3/9/2006

La Nueva España

CUENCAS

Más de la mitad de la superficie de las Cuencas será protegida con el futuro parque del Aramo

Esta sierra aportará 5.300 hectáreas a la red de paisajes de los valles mineros, que ya tienen mil kilómetros cuadrados de reservas naturales

Mieres / Langreo,
Beatriz G. FANJUL

Más de la mitad de la superficie de las Cuencas será espacio protegido si el Principado incorpora finalmente la sierra del Aramo a la red de paisajes naturales tal y como reclaman alcaldes, montañeros y ecologistas. Este enclave, que abarca a los concejos de Quirós, Riosa y Morcín, aumentaría en 5.300 hectáreas el espacio protegido de las Cuencas, que actualmente ronda ya las 100.000 hectáreas (mil kilómetros cuadrados) entre las distintas modalidades de conservación: paisajes y espacios protegidos, parques naturales, lugares de interés comunitario (LIC) y zonas de especial protección para las aves (ZEPA). La última incorporación a la red de paisajes fue la del parque natural Ubiñas-La Mesa, de reciente declaración, que abarca a 30.000 hectáreas.

La red de las Cuencas está encabezada por el parque natural de Redes, con 37.803 hectáreas de extensión, que además es zona de especial protección para las aves y reserva de la biosfera. Varios colectivos ecologistas piden al Ministerio de Medio Ambiente que dé un paso más en la declaración de este espacio para que sea, a medio plazo, parque nacional. A caballo entre las dos Cuencas, se levanta también el paisaje protegido de Langreo, Laviana, San Martín del Rey Aurelio y Mieres, con 13.225 hectáreas. La red se completa con otros monumentos naturales declarados de protección y con lugares de interés comunitario, como el Río Negro-Aller, Valgrande o el LIC Aller-Lena.

Según defienden alcaldes, ecologistas y montañeros, en esta lista de espacios protegidos encaja a la perfección la sierra del Aramo, cuya declaración está prevista en el plan de ordenación de los recursos naturales de Asturias (PORNA) desde 1994 pero todavía se encuentra sin ejecutar. En concreto, el PORNA propone la declaración de 5.300 hectáreas de esta sierra entre los concejos de Quirós, Riosa y Morcín con una gran riqueza paisajística y con un amplio patrimonio etnográfico. Según el experto montañero Ángel Fernández Ortega, miembro de la Federación Asturiana de Montaña, destaca, sobre todo, por su acusado relieve, que contrasta con el suave contorno de los cordales, especialmente duros en su vertiente occidental. La combinación entre su actividad ganadera y la peculiar fisonomía de sus montañas «la convierten en un área de elevado valor paisajístico», afirmó.